No sé si es que el tema no me interesaba para nada, el último día de un hombre que se va a matar porque no le ve sentido a la vida porque es un existencialista de mierda, ay pobrecito, qué duro que es todo, má sí, andate a laburar al Congo, que los diálogos eran horribles con ganas, literarios, extraños y encima, declamados, que esta película es la suma de todos los clichés de película francesa que existen, es más, es la película que creo que se imagina la gente cuando piensa en cine francés, gente fumando vestida de negro discutiendo sobre filosofía barata o quizás la suma de todo eso pero ayer abandonamos una película por primera vez en lo que va del blog.
El dudoso honor le fue concedido a Le feu follet (1963) de Louis Malle.
Desde acá le agradecemos el profundo sueño en que nos hizo caer y la noche sin desvelos que le siguió.
(ojo, capaz les gusta, leí críticas super elogiosas donde resaltan su qué sé yo y esto y lo otro, a MI me pareció un bodrio sin límites)
con todo lo que hay para ver gracias por hacernos la selección emperatriz y gurú!
ResponderEliminarIgual me olvidé de decir que la música era de Erik (o Eric?) Satie, muy buena, pero mejor comprarse el disco
ResponderEliminarNo vale!!!! Faltó saber con que maridaron este intento fallido.
ResponderEliminarMuaaaaa
Ah cierto, perdón:
ResponderEliminarmate con Tofi Light (yo, no sé si será realmente light, la etiqueta no venía con la información) y Mantecol (él).
Antes había hecho un risotto con sardinas y tomates secos. Un manjar, vea.
NOooo, el tofi light NO da.
ResponderEliminarIsil, es muy rico. Yo lo banco.
ResponderEliminartofi con mate?
ResponderEliminarno es una combinación medio explosiva esa? como que tenés que correr al baño después, no?
(que fina estoy hoy)
Vivi, a mi nada me cae mal.
ResponderEliminarNo vi la peli.
ResponderEliminarDe Satie conozco la Gymnopedie y chau.
El Tofi light no lo probé pero no te doy más bola porque me hiciste adicta al Cofler light de almendras.
Ah que lindo Satie, lo oigo x la mañana y me da calma feliz.
ResponderEliminarPodés creer que mi reader no me actualizó nunca este blog?
ResponderEliminarY yo que lloraba desconsolada tu ausencia.
(voy a tener en cuenta la recomendación de la peli, tengo un insomnio que no me deja vivir)
Una, es mejor el Cofler, probaste otro que hay light pero de coco? ese me gustó.
ResponderEliminarDos, yo tengo un problema con Satie. Como buena muchacha de los ochenta, me dicen Eric... y yo completo con: Charretier!!! el peluquero ese de las propagandas de Sedal, platinado tipo Billy Idol, y me lo imagino tocando el piano. Así no puedo ser culta. Mi pasado me condena.
Dire, vida mía, a ver si aguantás hora y veinte como aguanté yo, te desafío.
Marie, me conocés...ya probé toda la gama Cofler light!! (y por supuesto todos me gustan, qué desgracia)
ResponderEliminarHola Mari! dos cosas:
ResponderEliminarMe encanta saber que abandonás películas! no sé si ya lo hábías comentado, pensé que nunca lo hacías...
Eric cHartier era lo más!! Me trastornaba ese tipo!!! Tenía ese acento insoportable...
Aldana, somos humanos, abandonamos películas. Aparte a la hora veinte estaba roncando ya, después de tratar de mantenerme despierta con este plomazo.
ResponderEliminarCómo era la frase latiguillo de EC? no me acuerdo..
Era algo así?
ResponderEliminar"why Am i here ? because i ....i´m gonna show you the new and cheaper, Sedal Duo, finally the technology of the two in one..."
corregime si me equivoco!
Era "cada mujer tiene su propio estilo, el arte es saber interpretarlo. Eric Chartier, peinador estilista"
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